Participantes del proyecto de Cruz Roja en Herrera de La Mancha representarán una obra dentro de un taller de teatro terapéutico

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Esta iniciativa, enmarcada en el programa Atención a personas con gestión inadecuada de su adicción en prisión, trabaja la igualdad de género en el centro penitenciario. 'Un grito en la oscuridad' será interpretada por siete internos el día 20 de septiembre.

El equipo de Atención al Drogodependiente de Cruz Roja, que interviene en el Centro Penitenciario Herrera de la Mancha desde el año 1998 a través del programa Atención a personas con gestión inadecuada de su adicción en prisión, está trabajando la igualdad de género de manera transversal y para ello, entre otras actividades, ha puesto en marcha un taller de teatro terapéutico.

 Uno de los resultados de este taller es la obra Un grito en la oscuridad , que han ensayado con los participantes del programa durante meses y que el próximo día 20 de septiembre, dentro de las actividades para celebrar el Día de la Merced en el centro penitenciario , se representará con la interpretación de siete de los internos que están en tratamiento en este programa.

 La obra, un texto teatral escrito por Marta Cecilia Salcedo (docente del municipio de Medellín) con versos de Gioconda Belli (poeta nicaragüense) y Teresa Mabel Meneghini (poeta española), escudriña la historia del papel de la mujer en diferentes épocas y diferentes escenarios . La obra no es una protesta, ni una parodia del dolor, sino que simplemente trata sobre la necesidad de reconocer que tanto hombres como mujeres compartimos un mismo espacio y que, por siglos, no nos conocemos. Ahonda en cómo solo a través de la palabra podemos ver en el otro su valor, reconocer que tanto hombres como mujeres tenemos un papel significativo en la existencia del género humano.

 Uno de los objetivos del programa de adicciones de Cruz Roja en el centro penitenciario de Herrera de La Mancha es visibilizar la lucha por la igualdad en el colectivo de personas que están privadas de libertad. Además, a través del taller de teatro terapéutico se ha pretendido crear un espacio donde poder expresarse libremente y desarrollar la creatividad; ayudar a mejorar capacidades personales, autoconocimiento y mejora personal; aprender a controlar y gestionar emociones; desarrollar habilidades sociales como la escucha activa, empatía o la confianza; trabajar la expresión corporal o adquirir nuevas alternativas de ocio.

 Los resultados a lo largo de la preparación y los ensayos de la obra han sido positivos y satisfactorios, ya que el teatro en sí es una actividad terapéutica que aporta beneficios tanto a nivel individual (mejora de autoestima, creatividad, relajación…) como a nivel grupal, ya que la cohesión entre los diferentes participantes ha mejorado.