La quimioprofilaxis es la medida que primero se toma y la decisión de ofrecer la vacunación deberá plantearse cuando se tengan los resultados del tipo de meningococo.
Activados los protocolos de actuación respecto a los contactos estrechos de la joven fallecida debido a una sepsis por meningococo en Cabanillas del Campo
Desde la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de
Sanidad, y en relación al fallecimiento debido a sepsis por meningococo
de una joven estudiante de 17 años de Cabanillas del Campo, en la
provincia de Guadalajara, se ha informado de que la sección
de Epidemiología de Guadalajara ya ha activado los protocolos de
actuación.
Desde Salud Pública se recomienda la administración de quimioprofilaxis
(uso de medicamentos para prevenir la infección y sus consecuencias) a los contactos estrechos lo antes posible.
Los
contactos estrechos del caso, según indique Epidemiología, tienen un
riesgo aumentado
de desarrollar la enfermedad respecto a la población general, sobre
todo en los primeros 7-10 días tras la aparición del caso. Por este
motivo, se recomienda la administración de quimioprofilaxis a los
contactos lo antes posible.
La quimioprofilaxis es la medida que primero se toma y la decisión de ofrecer la vacunación
deberá plantearse cuando se tengan los resultados del tipo de meningococo.
Sepsis meningocócica
La meningitis y la sepsis no son muy frecuentes, pero sí son enfermedades graves.
Cuando
alguien tiene sepsis meningocócica, las bacterias entran en el torrente
sanguíneo, se multiplican y dañan las paredes de los vasos sanguíneos.
Esto
causa hemorragias en la piel y los órganos.
Más del 95 por ciento de los individuos que padecen enfermedad meningocócica están previamente
sanos o, al menos, no se detecta en ellos una especial susceptibilidad a enfermar.
La medida más eficaz para luchar contra esta enfermedad y sus nefastas consecuencias
es la vacunación sistemática desde edades tempranas de la vida.
La
enfermedad meningocócica representa a menudo un reto diagnóstico para
el médico, ya que en sus fases iniciales
puede ser indiferenciable clínicamente de un proceso infeccioso banal.
La sintomatología inicial puede ser inespecífica (fiebre) o incluso,
síntomas atribuibles a procesos virales comunes (dolor de garganta,
dolor abdominal, diarrea). En adolescentes, el diagnóstico
suele ser más tardío, lo cual puede conllevar un riesgo mayor de
fallecer a consecuencia de la enfermedad meningocócica.
Afortunadamente, la enfermedad meningocócica es una enfermedad infrecuente.
La letalidad de la enfermedad meningocócica, a pesar de la mejora en los métodos diagnósticos y terapéuticos,
continúa siendo alta (media del 10 por ciento), siendo mayor en los casos de sepsis.