“Un ejemplo más que pone de manifiesto -en la semana del Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo-, la impunidad con que multitud de empresas juegan con la vida de sus trabajadores y que, lamentablemente, semana sí y semana también, nos vamos encontrando. En lo que va de años llevamos ya 18 accidentes entre graves, muy graves y mortales. Un verdadero escándalo que tenemos que frenar. Pedimos a la patronal que por fin se ponga manos a la obra para combatir esta lacra que es la siniestralidad laboral”. “A raíz de la denuncia interpuesta por CCOO, se ha podido constatar la responsabilidad empresarial tanto de la empresa principal como de la contratista y subcontratista. Y gracias a ello, el trabajador accidentado podrá beneficiarse de un recargo de prestaciones durante el tiempo que dura su situación de incapacidad”.
La Inspección de Trabajo responsabiliza a tres empresas de la descarga eléctrica sufrida por un trabajador en el parque fotovoltaico de Alcolea de Tajo
La Inspección de Trabajo responsabiliza a tres empresas de la descarga
eléctrica sufrida por un trabajador el pasado 15 de noviembre en la planta
solar fotovoltaica Alcolea 1, de Alcolea de Tajo (Toledo), de la que hubo de ser
trasladado a la Unidad de Quemados del Hospital de Getafe por la gravedad de
las lesiones.
CCOO-Toledo, que denuncia
todos los accidentes laborales graves, muy graves y mortales que se registran
en la provincia, ha recibido el acta de infracción con el que la Inspección de
Trabajo finaliza sus actuaciones en relación con el accidente sufrido por el
mencionado trabajador autónomo, socio de la empresa Jarillo Isener SL, subcontratada
por la contrata de mantenimiento del huerto solar de 2,2 MW (Ríos Renovables SL),
del que es contratista principal una tercera empresa, SIDIR SL, que ejerce la
gestión del centro de trabajo.
“Como el 95% de los siniestros
laborales cuyas causas investiga, la Inspección de Trabajo determina también en
este accidente la responsabilidad empresarial, cuya infracción de la Ley de
Prevención de Riesgos Laborales y del Estatuto de los Trabajadores califica de ‘grave’,”
indica Sonia Sanz, secretaria de Salud Laboral de CCOO-Toledo.
En este caso, a partir de
la documentación y testimonios recabados, la Inspección relata que el accidente
se produjo en torno a las 11.00 horas, cuando la víctima recibió una descarga eléctrica
al entrar en la caseta donde se ubica uno de los centros de transformación de
la planta fotovoltaica, para proceder a realizar su mantenimiento preventivo y
correctivo anual; como ya había hecho previamente con otros diez transformadores, a lo largo de la mañana y junto con otro
compañero trabajador de la contrata principal Ríos Renovables SL.
Antes de acceder a este
tipo de instalaciones, se deben realizar cinco acciones “básicas e
indispensables para trabajos con riesgos eléctrico: 1ª Desconectar. 2ª Prevenir
cualquier posible realimentación. 3ª Verificar la ausencia de tensión. 4ª Poner
a tierra y en cortocircuito. 5ª Proteger frente a elementos próximos en tensión
y, en su caso, establecer una señalización de seguridad para delimitar la zona
de trabajo.”
“Es seguro -añade el Acta
de la ITSS- que al menos la verificación de la ausencia de tensión no se
realizó”. El propio trabajador accidentado lo declaró así desde el hospital de
quemados de Getafe. ¿Por qué se saltó este paso? Porque, tal y como determinaron
tanto el propio inspector actuante, como el técnico de Prevención de la JCCM y
la Guardia Civil, “no disponía de equipos adecuados para verificar la ausencia
de tensión, la pértiga aislante que se encontraba en el centro de trabajo
estaba inoperativa.”
“Los hechos descritos constituyen
infracción administrativa de la empresa Ríos Renovables SL en materia de
Seguridad y Salud Laboral (…) vulneran los artículos 4.2 d) y 19 del Estatuto
de los Trabajadores y artículos 14, 15 y 17 de la Ley de Prevención de Riesgos
Laborales (…) La infracción descrita está tipificada como Grave (…) La empresa
principal responderá solidariamente con los contratistas y subcontratistas”, concluye
la Inspección.
“No disponían de equipos adecuados
para algo tan fundamental como comprobar si había o no había tensión. Las
herramientas que tenían, la pértiga, no funcionaba. La puerta de acceso, que
tiene que tener una cerradura de seguridad, no tenía cerradura ninguna, estaba
sin bombín… Un ejemplo más que pone de manifiesto -en esta semana, la semana
del Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo-, la absoluta impunidad
con que multitud de empresas juegan con la vida de sus trabajadores y que,
lamentablemente, semana sí y semana también, nos vamos encontrando.”
“Hay que recordar que en
la provincia de Toledo llevamos en lo que va de año 18 accidentes entre graves,
muy graves y mortales. Un verdadero escándalo que tenemos que frenar. Pedimos a
la patronal que por fin se ponga manos a la obra para combatir esta lacra que
es la siniestralidad laboral”.