En la noche del pasado sábado el castillo de Calatrava La Nueva, durante la celebración de “La VII Noche de las Velas” organizadas por Villa Isabelica, se iluminó bajo la cálida luz de miles de velas, aportando una belleza insuperable al entorno. El evento, que un año más, ha sido todo un éxito gracias al empeño personal de José Luis Naranjo, ofrecía un recorrido cultural por los lugares más emblemáticos de la fortaleza como el paseo hasta la Iglesia, a través de “La Calle de los Artesanos” y vuelta desde el Patio de Armas del Castillo, pasando por el Horno de Pan, la Capilla de la Virgen de los Mártires del Cementerio y la Hospedería.
Calatrava La Nueva volvió a brillar en la mágica Noche de las Velas 2025 organizada por Villa Isabelica




De
esta forma, en el Horno de Pan, disfrutaron del patrimonio histórico y
las melodías interpretadas por el trio musical Eanes, Música Antigua de
Ciudad Real, compuesto por Noemí Ruiz Polo, soprano, y los hermanos Sergio
y Óscar Moreno, que interpretaron música del Renacimiento y alguna cantiga
medieval de Alfonso X El Sabio, en concreto la cantiga de Santa María
doscientos cinco, "Oraçon con piadade"; la danza que se llama "Daca
bailemos, carillo", un famoso villancico del compositor renacentista
español Juan del Encina; algún tema de origen sefardí, como “Partos
trocados”; alguno de origen francés, como la danza francesa animada “El
Turdión”; o el romance de Antequera, “Partió el moro”, muy, muy
bonito; y algunos otros temas más, de origen sefardí con sonoridad de origen
mozárabe.
Para
ello utilizaron instrumentos como la “vihuela”, un antiguo instrumento
de cuerda pulsada, similar a la guitarra, que fue muy popular en España y
Portugal durante el Renacimiento. Generalmente tiene seis órdenes de cuerdas
dobles y fue un instrumento importante en la música cortesana. También
utilizaron diversas flautas de pico Barrocas e instrumentos de
percusión. Eanes posee laúdes medievales, laúdes renacentistas y violas
de gamba que en esta ocasión no han utilizado. Todo un placer para los amantes
de este tipo de música en un entorno único.
En
la parte norte del Castillo de Calatrava La Nueva, se conserva su
Iglesia del siglo XIII, donde tuvo lugar la actividad cultural: “Kairos”,
en la voz de Rocío Solís, el baile de Gema Yagüe y la magia de la
guitarra de Pablo Vega. Un espectáculo que rompe barreras y une
generaciones. Con la magia del cante, el sonido vibrante de la guitarra y la
expresión intensa del baile, llevando al escenario una fusión innovadora de
flamenco con influencias de diversos géneros. En este viaje, se sumergen en la
juerga y la rumba, invitando al público a sentir el arte con intensidad,
celebrando la vida y la libertad a través de la música y el baile. Una
experiencia única donde el duende flamenco se reinventa, sin perder su esencia,
pero abriendo paso a nuevas sonoridades que encienden el alma y que en la
iglesia sonaba de manera aún más especial.
El
cementerio, conocido como el Campo de los Mártires, es un lugar cargado
de simbolismo. En su interior se encuentra la capilla de la Virgen de los
Mártires, dedicada a la patrona de la Orden de Calatrava. Para José
Luis Naranjo, promotor del evento, es “un rincón que transmite paz. Te
sientas ahí a escuchar las dos guitarras del Dúo Contrastes y las
guitarras te enamoran en ese lugar”. El dúo de guitarras ‘Contrastes’,
es un tándem formado por Miguel Herreros y Celia González de la Aleja,
donde experiencia y frescura se unen para interpretar un repertorio extenso con
una amplia variedad de composiciones con las que disfrutaron todos los visitantes
que se acercaron a la capilla.
El
patio de armas es la primera zona de acceso que nos encontramos en la subida al
castillo, se accede a ella desde una bóveda empedrada con arcos ovalados, allí
encontraremos una escalera de caracol que da acceso a la biblioteca y las
escaleras por las que se puede seguir subiendo al castillo. Allí tuvo lugar la
animación teatralizada con historias y música a cargo de los Trovadores de
Calatrava, toda una alegría para el alma que la reverberación del patio
potenciaba y “donde la gente que se colocaba debajo de los arcos y la gente que
se subía a la escalera, y los veía desde arriba, disfrutaron interactuando con
ellos”, puntualizaba Naranjo.
No
menos interesante fue la observación de las estrellas gracias a la Asociación
Viseña Amigos de la Naturaleza (AVAN), observando el cielo desde la Hospedería
del Castillo, donde la arquitectura, la luz de las estrellas y de las velas
se entrelazaron para crear una experiencia inolvidable con la astronomía de
fondo, obteniendo un éxito tremendo, y donde los miembros de AVAN “se
han disfrazado, se han personalizado con su bata y lo han hecho genial. Han
encantado a la gente y los han encandilado”, nos dice el responsable del restaurante
Villa Isabelica, quien realiza una valoración muy positiva del evento.
Además
de estas actividades, los más de 300 visitantes, también disfrutaron con el
trabajo de los ocho artistas que han participado en el “II Certamen de
pintura rápida nocturna”, plasmando en lienzo la atmósfera única de “La VII
Noche de las Velas” organizada por Villa Isabelica desde los diferentes
rincones de la fortaleza. Certamen dotado con cuatro premios: Un primer premio
de 500 €, por SETE (J. E. Gálvez); un segundo premio de 400 €, por Acalia; un
tercer premio de 300 €, por el abogado (José Luis Martín Monrroy) y un cuarto
premio de 200 €, por Restaurante Villa Isabelica.
Los
premios fueron entregados durante la sobremesa de la cena que se pudo degustar
en los salones del restaurante asador Villa Isabelica, otorgando el
primer premio a Javier Martín Aranda de Bolaños de Calatrava, licenciado
en Bellas Artes por la UCLM y con un amplio currículo y reconocimientos a nivel
nacional. El segundo premio fue entregado a Samuel Muñoz Salcedo; el
tercer premio fue para Juan Gallego Martínez y el cuarto premio le fue
entregado a Nora Gallego Pascual.