31 de mayo, día en el que se celebra el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, y que en esta ocasión se ha teñido de luto a causa de la pandemia de la COVOD’19, el jefe del Ejecutivo regional ha ensalzado, la actitud, el coraje y la unidad de la sociedad castellano-manchega. En nombre de toda una sociedad: Mercedes Fuentes Santos, Guardia Civil; Marcos Cruz Mateo, militar; José Luis Martín Mora , Policía Local; Oscar Sánchez-Portal Medina, Policía Nacional; Mariano Perea Fernández de Protección Civil; Miguel Estévez Prado, bombero; Jorge Zapatera Maroto de GEACAM; Antonio Sancho Buil, agente medioambiental; Justina Sánchez-Pinilla Carrillo, afectada de la COVID; Luz Divina Campos Borrallo, cajera de una gran superficie; María Elena Martínez Vedriel, técnica del transporte sanitario; Juan Francisco González Pinilla, transportista; María José Sánchez Carretero, médica de la Unidad de Cuidados Intensivos; Virgilio Cencerrado, enfermero; Natividad Gil Pérez Técnica, en Cuidados Auxiliares de Enfermería; Felipe Barba López, celador; Jimena Úbeda Ormeño, auxiliar de residencia; Alejandro García-Gasco Alcalde, agricultor; Emérita Domínguez Sánchez, docente; Emilia Francisca Ramírez Moraga, voluntaria de Cruz Roja y Vanessa Calleja Pezuela, trabajadora del 112.
Castilla-La Mancha fijará en el acto institucional del Día de la Región un reconocimiento a víctimas afectadas y servicios directamente implicados en la pandemia de la COVID19
El Gobierno de Castilla-La Mancha fijará en las sucesivas celebraciones
del Día de la Región, el 31 de mayo, un reconocimiento a la victimas
afectadas por la pandemia de la Covid19, así como a todos los sectores
que se han visto implicados en combatir sus
consecuencias.
El
presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, lo ha indicado
esta mañana
en el marco de un emotivo discurso, que ajeno a valoraciones y balances
políticos, ha pretendido rendir un merecido recuerdo a los muertos de
la región, víctimas de la Covid al tiempo que ha hecho un reconocimiento
a buena parte de los sectores laborales y
servicios públicos que han luchado contra los estragos que ha causado
la pandemia mundial.
“Hoy
es un día para compartir sentimientos, valores y raíces”, ha dicho el
jefe del
Ejecutivo al tiempo que se ha mostrado convencido de que hay momentos
en la vida en los que, “todos somos uno, ese momento en el que todo el
mundo se siente comunidad”. Para el presidente autonómico “este virus
nos ha hecho más pueblo y más nación”.
Lejos
de hacer de la jornada de hoy una fiesta, Emiliano García-Page sí que
ha querido
exhibir el orgullo que siente y respira Castilla-La Mancha por los
hombres y mujeres que, día a día, han trabajado por mantener el pulso de
esta tierra que ha sufrido en primera línea la onda expansiva del
virus. Del mismo modo, ha querido centrar la jornada
en expresar y compartir el dolor de las cerca de 3.000 familias que
lloran la pérdida de sus seres queridos, a los que ni si quiera pudieron
despedir.
Gratitud, coraje, unidad y futuro
“Gratitud,
coraje, unidad y futuro” han sido las palabras de García-Page ante
apenas
30 invitados, hoy protagonistas en el patio del Palacio de Fuensalida,
sede de la Presidencia del Gobierno regional. Un acto atípico para esta
jornada que ha estado marcado por las banderas a media asta, un puñado
de calas blancas enfundadas en un lazo negro
y otro ramo de rosas rojas y amarillas simulando la bandera de España.
Precisamente la bandera de España ha sido portada por un enfermero al
ser este el “año de la Enfermería y la Matrona”.
El
himno de España, tres piezas de música clásica, a cargo de Michal
Dmochowski en
el violonchelo y Juan José Montero, en el clave de la catedral Primada
de Toledo, ha generado en este acto la solemnidad de esta mañana de luto
y unidad ante el dolor.
En este contexto el presidente ha subrayado el término de la palabra “gratitud” que
“nos da plenitud como personas y que quiero hacer llegar a todos los que habéis participado en esta lucha”, ha dicho.
Del
mismo modo ha destacado la “honra y el honor” que ha supuesto prestar
un servicio
a toda la sociedad, una experiencia que “nos hace ser optimistas” tras
esa gran reacción conjunta. También ha destacado la unidad en el dolor
que ha sentido la inmensa mayoría de la población “y - ha añadido - nos
queda todavía pasarlo mal, yo hasta hace diez
minutos he estado enviando mensajes de pésame”.
Ante
esta situación, el jefe del Ejecutivo autonómico ha dado las gracias
por haber
estado al frente de la Comunidad Autónoma en un momento tan duro. “Para
mí ha sido un honor porque siempre, desde niño, tuve vocación de
servidor público”. En esta misma línea ha lanzado un mensaje de
optimismo a los castellano-manchegos, para que una vez
que el dolor se mitigue, “la sociedad vuelva a vivir en el optimismo y
la esperanza”.
21 calas blancas en honor al deber cumplido
Mercedes
Fuentes Santos, Guardia Civil; Marcos Cruz Mateo, militar; José Luis
Martín Mora , Policía Local; Oscar Sánchez-Portal Medina, Policía
Nacional; Mariano Perea Fernández, de Protección civil; Miguel Estévez
Prado, bombero; Jorge Zapatera Maroto, de GEACAM; Antonio Sancho Buil,
agente medioambiental; Justina Sánchez-Pinilla Carrillo, afectada de la
COVID; Luz Divina Campos Borrallo, cajera
de una gran superficie; María Elena Martínez Vedriel, del transporte
sanitario; Juan Francisco González Pinilla, transportista; María José
Sánchez Carretero, médica de la Unidad de Cuidados Intensivos; Virgilio
Cencerrado, enfermero; Natividad Gil Pérez
Técnica en Cuidados Auxiliares de Enfermería; Felipe
Barba López, celador, Jimena Úbeda Ormeño, auxiliar de residencia;
Alejandro García-Gasco Alcalde, agricultor; Emérita Domínguez Sánchez,
docente; Emilia Francisca Ramírez Moraga,
voluntaria de Cruz Roja y Vanessa Calleja Pezuela, trabajadora del
112.
Ellas
y ellos han sido los encargados de depositar una cala blanca, envuelta
en un lazo negro, en representación de los sectores más significativos
que han trabajado sin descanso en la lucha contra esta pandemia. A su
trabajo, agradecido y reconocido, el presidente ha querido sumar el de
los farmacéuticos, de los servicios funerarios, funcionarios,
conductores oficiales, empresarios, medios de comunicación,
el de la Iglesia Católica, las diputaciones y los ayuntamientos.
“Una
nación es un sentimiento profundo para compartir la vida, el miedo y el
éxito” ha dicho Emiliano García-Page convencido de que, “en esta
tierra de Don Quijote, sabemos lo que es el infortunio y el coraje, el
coraje de ayudar”.
El presidente de Castilla-La Mancha ha finalizado su intervención de hoy deseando “salud para toda la región”, con un mensaje de ánimo, convencido de que “vamos a crecer porque creemos más en nosotros mismos en nuestra región y en esta nación”, ha dicho. Del mismo modo, ha invitado a poner en práctica el coraje de la mano de la prudencia, “sin bajar la guardia”.