El Ayuntamiento de Albacete ha planteado en la reunión de coordinación que se está celebrando con la Consejería de Sanidad, la Subdelegación del Gobierno y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que el confinamiento de los más de 400 temporeros del asentamiento de la carretera de las Peñas se realice en otro lugar, distinto a estas naves abandonadas.

 Así lo ha anunciado el alcalde, Vicente Casañ, que ha comparecido ante los medios de comunicación esta tarde en la Casa Consistorial, junto al vicealcalde y concejal de Seguridad, Emilio Sáez, y el intendente jefe de la Policía Local, Pascual Martínez.

 En esta comparecencia, el regidor de la ciudad se ha referido al altercado que se ha producido esta mañana cuando un centenar de temporeros se han saltado el confinamiento dictado por la autoridad judicial, a raíz de los casos de Covid-19 detectados en dicho asentamiento. Hasta la fecha, según la información hecha pública por la Consejería de Sanidad, se han realizado 370 PCR, con un resultado de 21 trabajadores positivos, que están siendo trasladados al pabellón polideportivo del Instituto Tomás Navarro Tomás.

 “Como Ayuntamiento no miraremos para otro lado, empezaremos por clausurar este asentamiento, no podemos seguir consintiendo que centenares de personas, jóvenes temporeros en su mayoría, vivan en la inmundicia mientras trabajan en los campos de Castilla-La Mancha, porque en este caso su única falta es la pobreza y la miseria”, ha declarado Vicente Casañ. Así, ha señalado, la primera decisión es plantear a Sanidad que el confinamiento se realice “en lugares más apropiados y con una mayor seguridad para todos”, y ha puesto a disposición los recursos municipales.

 El alcalde ha explicado que el Ayuntamiento de Albacete se puso a disposición de la Consejería de Sanidad desde el momento en que el jueves por la tarde se les informó de la posibilidad de que hubiese un caso positivo de Covid-19, posibilidad que se confirmó y que dio lugar a que el viernes comenzase a realizarse las pruebas a todos los temporeros que malviven en las naves de la carretera de las Peñas.

 Preocupación y tristeza

 La situación se ha complicado esta mañana, ha admitido el alcalde, cuando un centenar de temporeros se han saltado el confinamiento que estaba decretado por orden judicial provocando “serios altercados” en la ciudad, que han dado lugar a “alarmantes escenas, que sin duda ninguna nos han llenado de honda preocupación y tristeza”, ha declarado Casañ.

 “Preocupación por la situación de miedo e inseguridad que han vivido nuestros vecinos, también los establecimientos de hostelería y otros comercios que se han vistos afectados y “tristeza por las circunstancias en las que malviven desde hace muchos años estas personas, víctimas de la pobreza. Lo que han hecho en cualquier caso, lo que se ha producido esta mañana, es injustificable, ahora este alcalde piensa también en la desesperación que pueden llegar a sentir”.

 El intendente jefe de la Policía Local ha explicado que desde que el jueves tuvieron presencia en este asentamiento, el comportamiento de las personas que viven en él había sido satisfactorio, hasta el episodio de esta mañana que ha durado en torno a una hora y media.

 Pascual Martínez ha destacado la cooperación existente entre la Policía Local y el Cuerpo Nacional de Policía, que ya ha recibido refuerzos de efectivos policiales de otras provincias para evitar que episodios como éste se repitan. Según ha explicado, las propias condiciones en las que viven en este lugar han motivado esta protesta, unas condiciones que, ha opinado, deben “dignificarse”, de ahí que haya resaltado la decisión de clausurar este asentamiento.

 El alcalde ya se ha puesto en contacto con la Federación de Asociaciones de Vecinos, la Federación de Empresarios de Hostelería y la de Comercio, igualmente ha trasladado la información que tiene disponible a la Junta de Portavoces donde están representados los grupos municipales.

 Mañana el Equipo de Gobierno se reunirá con las Asociaciones de Vecinos de los barrios de San Pedro Mortero, Sepulcro-Bolera y Pedro Lamata, barrios que conocen muy de cerca y desde hace muchos años, la realidad de los asentamientos, “un problema complejo que debemos abordar todas las administraciones de la mano”, ha declarado.

 Vicente Casañ ha recordado que esta situación no es nueva, sino que verano tras verano, desde hace más de una década se repite la presencia de personas que vienen a trabajar al campo de Castilla-La Mancha, pero vienen a dormir a nuestra ciudad. La crisis del Covid-19 “ha agravado más si cabe esta situación, ya conocíamos las consecuencias sanitarias de la pandemia, también las económicas y estamos empezando a vivir las sociales”, ha declarado Casañ, que ha pedido la “implicación de todos” para dar solución a este asunto complejo.

 “Su dimensión y complejidad hace que supere con creces las competencias de un ayuntamiento como es el de Albacete, pero también es cierto que al ser la administración más cercana somos los primeros que sentimos las consecuencias, y por la cercanía y responsabilidad que tenemos hacia nuestros vecinos debemos ser el desencandenante de la búsqueda de una solución definitiva”.

 Por su parte, el vicealcalde ha querido reconocer la labor que colectivos sociales como Cáritas, Cruz Roja, ACCEM o Acaim, están realizando en los asentamientos. Emilio Sáez ha indicado que en estos momentos la situación de seguridad está bajo control y que llegarán a la ciudad refuerzos suficientes; al tiempo que ha confiado en que lo que ha ocurrido no dé lugar a que se estigmatice a este sector de la población.