La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) expone el riesgo que entraña para el personal de reparto de Correos el desempeño de su labor en determinadas franjas horarias debido a las altas temperaturas, por lo que exige a la dirección de la empresa pública postal la adaptación de la jornada laboral a tramos horarios con menor incidencia de calor.
CSIF exige flexibilidad en la organización del trabajo de los carteros debido a las altas temperaturas
El presidente del Sector de Entidades Públicas Estatales en
CSIF Castilla-La Mancha, Manuel Maldonado, advierte que el sindicato estará
vigilante en relación al cumplimiento de las medidas de prevención contra las
altas temperaturas entre el personal de Correos e insiste en que las labores de
reparto deben concentrarse en las horas de menos calor, al mismo tiempo que
señala además que las oficinas y centros de trabajo deben contar con una
climatización adecuada.
Ante las altas temperaturas que actualmente se registran en
muchas zonas de la región deben limitarse las tareas pesadas que requieran un
gasto energético elevado, y deben además adaptarse las funciones más duras.
Maldonado destaca el papel de los carteros por su relevancia como servicio
público, con situaciones cotidianas como “subir a pisos altos sin ascensor para
entregar correspondencia o certificado, o subir cuestas en las que hay que
empujar el carro, o llevar a cabo la carga y descarga de paquetes”, son algunas
de las tareas que adquieren ahora un mayor esfuerzo a causa del calor y “que se
ve agravado además por la preceptiva mascarilla, que es absolutamente
necesaria, pero indudablemente comporta mayor dificultad para estos
profesionales en su día a día”.
Ante esta situación, CSIF pide la dirección de Correos al
adaptación del ritmo de trabajo a las circunstancias y recuerda “no estamos en
un verano al uso”, por lo que es el momento de abordar “el refuerzo de
contrataciones para hacer frente a la situación”.
Igualmente, CSIF recuerda que los empleados y empleadas de
la entidad postal deben disponer de los equipos de protección individual (EPI)
adecuados para cada puesto, con la climatización adecuada y con la instalación
de persianas, estores y toldos en locales cerrados para disminuir la
temperatura.