Los sindicatos mayoritarios en el sector sociosanitario de CLM, FeSP UGT CLM y CCOO CLM, y una de las patronales del sector, ACESCAM, mantuvieron ayer el primer encuentro de la nueva Mesa de Seguimiento de las Residencias de Mayores de CLM, que tiene como objetivo poner de manifiesto las situaciones vividas desde el inicio de la pandemia de la COVID-19 y analizar los problemas del sector de cara a los próximos meses.
UGT, CCOO y ACESCAM constituyen una mesa de seguimiento de las residencias de mayores de CLM
Las tres organizaciones han acordado crear este foro de
diálogo a raíz de las dificultades derivadas de la COVID-19 para poner en común
los problemas detectados por cada organización y trasladar propuestas conjuntas
de mejora a la administración. “Ponemos énfasis en lo provechosa que ha sido la
reunión para todas las partes y coincidimos en que la situación actual requiere
del impulso tanto de la Administración de los Centros como de los trabajadores
y de los familiares de los usuarios, a efectos de conseguir el objetivo por
todos deseado de reducir el efecto de la pandemia en los centros residenciales”
detallan de manera conjunta.
El secretario del sector Socionsanitario de FeSP UGT CLM,
Luis Manuel Monforte, valora el inicio de esta vía de diálogo en un momento
como el actual en el que las previsiones para el sector “no son buenas”.
“Nuestra percepción es que la administración está desatendiendo al sector de
las residencias y de la Dependencia en CLM”, afirma Monforte, que muestra su
preocupación por la previsible destrucción de empleos en el sector. “Tememos
que se destruya un empleo realizado mayoritariamente por mujeres de entre 55 y
60 años en entornos rurales, agravando así la despoblación. Hay que hacer
viable el sector si queremos evitar esto a toda costa”, defiende.
Por otra parte, Monforte ha recordado que sigue sin existir
un protocolo de test efectivos a usuarios y personal como si tienen otras CCAA,
por lo que muchas trabajadoras y trabajadores se han reincorporado de las
vacaciones sin su realización. Tampoco tienen conocimiento las tres
organizaciones reunidas del Protocolo de Atención Temprana anunciado por la
Consejería de Bienestar Social en agosto, y faltan EPIS para el personal y los
usuarios. “Las empresas nos manifiestan que les es imposible hacer frente a una
reserva de EPIS suficiente para una segunda oleada y que la alternativa de la
administración de adquirirlos a través de la empresa pública creada para ello
no es efectiva ya que no es más económica que sus proveedores habituales”,
explica Monforte.